sábado, 22 de agosto de 2015

Hamor


Antes que digáis nada: No. No es una falta de ortografía. Ni tampoco es un descuido. La palabra está mimada al detalle y no, no es un capricho mío. Es que hoy pega decirlo, 'hamor'. El amor que tiene que haber por ahí. El amor que se habla. El amor que hay. El amor con hache.

Ya hemos asumido que uno ama cómo y cuándo quiere. Y el amor no está hecho para imitaciones de mercadillo. Amar se debe de amar con originalidad. Con todos los derechos reservados. Con la marquita de agua de creado precisamente para ti. Se debe amar como si fuera la primera vez, pero más importante, como si fuera la última y definitiva.

Yo no quiero hacer el amor, quiero hacer el 'hamor'. Y aunque suene igual creedme que no tienen nada que ver. Hay que quererse como debe ser. Todo muy humano, muy cuerpo a cuerpo. Hacer el amor con amor. Que parece que se da por hecho, pero que no se practica igual a como se desea.

Por relación de equivalencia, nadie es más que nadie. Y al amor hay que pedirle humildad. Un poquito de ponerse en el lugar del otro y seguir amando. Al amor se le debe de dar halagos. Se le debe piropear de lo lindo. Mañana, tarde y noche. Porque amar debe de ser atemporal y continuo. Ya no se lleva eso de espérate a o necesito tiempo. El amor es ya. El amor es hoy.

Y por eso no pienso esperar gastar ni una hache más. Ya sé como tengo que amar de puertas pa' fuera. Amar se aprende habiéndose primero querido mucho. Porque amor no es cómo se escriba, amor es cómo se sienta.

Y a ti, amor, te queda de maravilla.  

1 comentario:

Escribe bonito...