martes, 12 de mayo de 2015

Por Si Algún Día Te Apetece

Me apeteces. Mucho. Tengo unas ganas de ti que ni te imaginas. No, no le hablo a tus labios, qué también, pero no. Esta vez no. Esta vez muerdo por ti. Hoy más que nunca necesito de esa boca algo más que besos, necesito algo más que labios.

Hoy tengo ganas de ti. Mañana y pasado también. Para mí ya es inútil contar horas y minutos, cuando lo que deseo a día de hoy, es andar a segundos de ti, milésima a milésima de tus “siempre”.

Hoy, por fin, te he puesto cara, nombre y apellidos. Hasta un bonito lunar recae por tu cuello pidiendo ser excusa de muchas cosas. Entre otras, de ser sentenciado a revivir la pasión que tanto nos faltó en esta piel. La tuya, la mía, o ya mismo la de ambos, juntas, rozando todas las razones de por qué hoy, tú y yo , tanto nos vamos a querer.

Hoy, amor, me apeteces. Quiero sentirte tanto como mirarte. Si puedo, me encantaría escuchar tu voz, tanto como tus latidos. Y que ahí, ambos acostados en las mismas sábanas nos prometamos dormir de lo lindo tantos sueños que están por llegar.

Quererte a largo plazo nunca fue tan fácil. Lo difícil es conservarlo en una cajita junto a las ganas. Y que, a ser posible, no estalle todo de golpe.

Como explotó todos mis “apetece de ti" hace apenas cinco párrafos.
O cómo acaban de explotar los tuyos tras otro texto más sin que sepas, que éste, también iba por ti.

Por si algún día te apetece. Algo como quererse, algo como sentirse cerca.

Algo más que leerme.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Escribe bonito...