domingo, 4 de enero de 2015

Hoy es Menos Domingo

Domingo es el día que sobra. El que tenemos guardadito para la pereza. El día para dedicarle veinticuatro horas a la nada. Al más absoluto abismo. Domingo es insípido y probarlo sabe a poco.
Domingo es excusas. Faltó sábado, faltó cariño,... Estamos mal acostumbrados a no pedirlo y domingo no se presta nunca a ello.

Los Domingos nos lo regalan como los auriculares en el AVE. Tómalo, si lo quieres es tuyo, pero a poco que lo uses, se rompen. Y al final acaban siendo un trasto más en tu equipaje. Domingo es ruptura. Domingo es carga.
Intentad que vuestros Domingos no sean domingos. Os lo recomiendo. Pedid un abrazo, un consuelo, un síntoma de afecto. Echaros a la cara una de esas de sonrisa larga e ilusión en la mirada. Acordaros de tener terapia con aquella que está sin ser llamada, sin ser buscada.
Quemad las penas y alegrías con ella porque es la única que entiende porque estás así, tan domingo. Dedicadle unos minutos, unos buenos días, unas palabras cómo estoy haciendo yo ahora, porque os va a salvar lo que queda de día, lo que queda de vida, lo que queda de domingos.
Invitadla a una copa, ponedla como prioridad en la vida y sentiros afortunados de tenerla cerca pero tan lejos. Porque esa que os digo os va a enamorar, os va haceros olvidar que hubo domingos de antaño, os va a bofetear la cara a besos. Porque ella sabe cómo levantarte, sabe como escucharte, devolverte la ilusión que creías perdida, sentirte útil , querido, extrañado. Queredla porque va a ser tu amiga, esa que nunca te dijo que estaba ahí pero estaba. Queredla porque es tu novia, tu mejor amiga, tu chica, tu amor, tu mujer y queredla porque esa estará todos los días.
De verdad creedme cuando os digo que con ella el tiempo es lo de menos. Que la fecha poco importa.
Que hoy soy más gracias a ella.
Que hoy es menos domingo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Escribe bonito...