miércoles, 24 de julio de 2019

Caprichosa

Que todo lo quieres. Que todo se te antoja. Niña que busca lo que nadie tiene. Con exigencias del guión. Pides los besos con abrazos por sorpresa. Roces que van a los besos de verdad. De estas que piden siempre fuera de carta. Caprichosa, que lo quieres todo. Que lo demandas sin pedido mínimo, sin coste adicional.

Amor a cobro revertido. De amores sin camiseta en el sofá. De antojadizas manías. Que cuando más pedía, más se le daba. Avariciosa de habernos querido mucho. De habernos amado mejor. Caprichosa de los momentos. Que siempre contabas las horas para volvernos a ver. De estas que te hacían perder los días queriendo. Muy queriendo. Que ahora me doy cuenta que hasta el tiempo has querido controlar. Caprichosa de bocados en mis labios. Ladrona de caricias. Que todas las demandabas desnuda al pie de una cama de hotel.

Caprichosa de mi cuerpo. Que has ido a probar cualquier recoveco de mi piel. Acumuladora de mis miedos. Que todos me quitaste con tus formas de querer. Veleidosa de cualquier muestra de cariño. Que todas las quería para ti. No compartiendo absolutamente nada. Que todo de mí lo querías hacer tuyo, muy tuyo. Y yo me dejaba tener.

Y que en cualquier rincón, paisaje, viaje, sitio querías más hechos, más palabras, más besos, más. Y llenaste todo el rincón de inolvidables. Y me fuiste a comer los labios, el cuello, los sueños. Y veía como callabas mi voz con un solo dedo de tu mano, exhausta, tirada allí donde me dejé perder muchas veces.

Caprichosa de versos, que todos los lees a escondidas, a solas. Como una ladrona de ilusión. Que toda te la escondes, que toda te la guardas. Y sin hablar pide todo un nosotros. Caprichosa de fotos, de vídeos, de juegos, de vicio, de un ratito más.

Recuerdo que, cuando te ibas,

Yo siempre era el que quería más...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Escribe bonito...