martes, 5 de septiembre de 2017

Ya llegará

Hay una cosa que no entiendo del amor. Bueno, o no quiero entender. Se trata del tiempo. A ver si me explico. No se trata del tiempo que dura una relación. Eso lo entendemos a modo de ostia bien dá en el momento que va a terminar. Ni de los momentos que recuerdas con esa persona. Que se entienden perfectamente cuando quieres más y más. Lo que no entiendo es el concepto del "ya llegará". Esos eufemismos de esperar a alguien. Eso es lo que no entiendo. ¿Esperar el qué? ¿Esperar a quién?

Es que discrepo mucho con esa frase. Si no ha venido ya, pregunto: ¿por qué iba a venir? Si la vida es tiempo, ¿por qué tengo que perderla en esperar a alguien que no se dignó a venir en su momento? Y no, no me vale eso de que a lo mejor es que no lo sabía. Porque cuando queremos algo, descarados somos un rato. Que todos sabemos provocar. Dar nombres allí donde había cualquier locución verbal. Que se nos ve venir desde Roma. Que cuando vamos a poker, no hay reina de corazones que tengamos que ocultar.

Ya llegará. Como si fuera el final de una etapa. Como si fuera la panacea de todo lo que queríamos. Me niego a pensar que el amor se encuentra esperando. Que no hay que hacer absolutamente nada. Que uno de estos días tontos, te cruzas y ya está. Pensar que es el destino el que te elige cuando, el cómo, y coño, hasta el donde. Midiendo cada paso falso que das. Moviéndote por el tablero como si fueras una ficha. Amor, fila 4, columna E. Jaque, mate.

Con lo bonito que es irse a buscar. Eso de encontrarse bajo sábanas desechas de un hogar. Mezclar el olor del café mañanero con tu aroma particular. Desayunarse.Volver a la cama. Volverse a encontrar. Con lo que gusta, no te digo, salir, sino más bien entrar. Eso de llegar a la vida de alguien sin molestar. ¿se puede? Entrar con ganas. Quedarse. A modo de prueba, empezarse a enamorar. Y ya está. Que no cuesta nada intentarse. Que no cuesta nada amarse ya.

Ya llegará, dicen. Como si fuera a consolarnos dos palabras que unidas son tan falsas como cualquier te quiero atrás. Porque ni llega, ni es ya. El amor hay que provocarlo. Ya basta de esperar.

Te lo digo, ya que lees, porque he ido a buscarte en twitter, en instagram. Te hubiera titulado cualquier escrito atrás. Porque de no tener obligaciones me hubiera plantado en la mismísima puerta de tu casa.

Pero como acostumbras,

No estabas...
Recibiendo la misma respuesta tuya de siempre acompasado por un silencio detrás del;
Gracias por lo de guapa. 
Eufemismo descarado de:

No estoy para ti. 
Ya llegará.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Escribe bonito...